Son sustancias que permiten recuperar el colágeno que vamos perdiendo a través de los años estimulando su renovación propia en el organismo.
Estos estimuladores actúan directamente sobre el fibroblasto cuando los colocamos en la dermis. El fibroblasto es una célula maravillosa propia de la capa dérmica de la piel y cuya función es fabricar todos los componentes de ésta. Con la edad y las agresiones externas el fibroblasto se va debilitando y pierde capacidad de funcionamiento, al estimularlo con estos productos provocamos una reactivación de su función que se traduce en la creación de nuevas fibras de colágeno que se van a organizar en los haces descritos, que dan tersura y salud a la piel.
Debemos infiltrarlo en la capa correcta de la piel mediante cánulas o agujas, el lugar donde vamos a insertar la cánula será previamente anestesiado, por lo que el procedimiento no duele.
Beneficios del bioestimulador de colágeno
- Estimula y maximiza la producción de colágeno de tipo 1 (encargado de mantener la juventud y volumen del rostro)
- Trata los signos de la edad, devolviendo la elasticidad y luminosidad a la piel
- Recupera la forma del óvalo y el volumen facial sin cambiar su expresión
- Mantiene y restablece la lozanía de la piel de manera natural
- Disminuye arrugas y suaviza líneas de expresión
¿Qué zonas trata?
- Rostro
- Cuello
- Escote
- Manos
Los bioestimuladores más utilizados son el PRP, el ácido poliláctico, la hidroxiapatita cálcica, la policaprolactona, la carboximetilcelulosa y polidioxanona.
Todos los principios activos descritos anteriormente son biocompatibles y reabsorbibles, con lo cual no nos deberían provocar ningún efecto adverso y además desaparecerán de la piel metabolizados por ésta una vez que hayan realizado su función.
El paciente puede incorporarse inmediatamente tras el tratamiento a su rutina habitual. Es posible una leve inflamación de las áreas tratadas durante 2 o 3 días y la aparición de algún hematoma que pueden durar 4-5 días. Siempre realizamos una revisión a las 2- 3 semanas para valorar el resultado.