La carboxiterapia es un tratamiento estético no quirúrgico que favorece la oxigenación de las células corporales mediante la infiltración de CO2 (dióxido de carbono).
Las microinyecciones de Co2 favorecen la oxigenación de los tejidos, mejorando la circulación local, estimulando la formación y reorganización de las fibras de colágeno y elastina, eliminando la fibrosis y activando la lipólisis (destrucción de la grasa).
El dióxido de carbono se inserta dentro de la piel a través de una aguja muy fina.
Las sesiones de carboxiterapia pueden durar entre 10 y 60 minutos, todo dependerá del equipo que se use. En nuestro caso es súper rápida la aplicación del gas.
El número de sesiones se establece en función del estado de cada paciente y de la cantidad de problemas que sea necesario abordar. Generalmente, se completan protocolos de entre 15 y 20 sesiones dependiendo de cada paciente.
Los efectos de la carboxiterapia corporal se pueden aplicar, entre otras, en el tratamiento de:
- La celulitis.
- Grasa localizada.
- Estrías.
- Flacidez de la piel.
- Circulación por lo que ayuda con las telangiectasias o arañas vasculares.
- Drenaje linfático.
- Rompimiento de fibrosis.
- Postoperatorio de liposucción.
- Postoperatorio de dermolipectomía.
En el área facial se usa para:
- Tratar acné activo
- Cicatrices
- Flacidez
- Ojeras vasculares y pigmentadas
- Bolsas en los ojos
- Alopecia areata
- Alopecia androgenética y fortificación del folículo piloso
- Reducción y flacidez de papada